Las Vírgenes de Sevilla se han caracterizado por su forma de
vestir a lo largo del siglo XX, algunas creando su propio estilo, bien
mediante el sello que le imprimían sus vestidores o por determinados
elementos que las diferenciaban del resto. Así, muchas de ellas
utilizan determinadas joyas que las caracterizan y distinguen de las
demás como, por ejemplo, el salvavidas y el ancla de la Esperanza
de Triana, la Rosa de Pasión del Subterráneo, las mariquillas de la
Esperanza Macarena, la rama de olivo de la Paz, la espiga de trigo
de Regla o el barquito de Consolación. En esta misma línea, aunque
no se trata de una joya propiamente dicha, se encuentra el elemento
decorativo y simbólico del fajín militar, motivo del presente reportaje,
como prenda o distintivo que muchas de las Vírgenes, en su mayoría
Dolorosas, poseen en su ajuar y que viene a engrandecer el porte
de majestad que se le imprime a la imagen de María Santísima para
presentarla ante los ojos de los fieles.
La mencionada prenda, cuyo nombre correcto es faja, se utiliza
por los generales cuando visten de paisano con traje oscuro, esmoquin
o frac siendo, por lo general, de seda natural y tejida en punto
español. Los militares utilizan normalmente el rojo y el celeste para
cualquiera de las tres armas que componen el campo militar, como
son, tierra, mar y aire. Así mismo, existe otro tipo de fajín de color
violeta del que se dará información más adelante. Las condecoraciones
militares se ponen siempre en el lado del corazón, motivo por el
cual se hace lo mismo con los fajines, ya que su color rojo representa,
simbólicamente, la sangre que el militar en cuestión está dispuesto a
derramar por su patria si fuese necesario y se le concede a los oficiales
del cuerpo cuando ascienden al cargo de general, estableciéndose
de esta forma el rango que se adquiere en la graduación. Igualmente,
en estos casos al militar se le obsequia con la Gran Cruz al Mérito
Militar si es del Ejército de Tierra, la Gran Cruz al Mérito Aeronáutico
si pertenece al Ejército del Aire o la Gran Cruz al Mérito Naval si corresponde
al Ejército de la Armada.
El fajín de color rojo lleva, casi siempre, dos elementos que lo
caracterizan y distinguen como son los entorchados y los flecos. Los
entorchados, vulgarmente conocidos como nudos, son una especie de
anillo que circunda el tejido con una hoja de laurel bordada en canutillo
de oro que indica el rango militar de la persona que lo lleva. Así,
mientras más entorchados tenga, mayor será el cargo ostentado. De
esta forma, los que tienen un nudo corresponden a general de brigada
y contraalmirante, los de dos a general de división y vicealmirantes,
los de tres a teniente general y almirantes y los de cuatro a general
del ejército como son el jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD),
jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), almirante general
jefe del Estado Mayor de la Armada (AJEMA) y jefe del Estado Mayor
del Ejército del Aire (JEMA). Igualmente, también lleva cuatro nudos
el de capitán general de los ejércitos, cargo que en la actualidad sólo
ostenta S.M. el Rey de España. Los flecos que penden de los borlones
pueden ser de canutillo de oro, porque el fajín es de gala, o rojos de
seda, si es de diario. La cabeza del borlón la podemos encontrar lisa
de pasamanería o bordada en oro y con motivos heráldicos o militares
de metal. El fajín celeste se concede a los comandantes, coroneles
y tenientes coroneles y se obtiene a modo de condecoración cuando
el militar realiza el Curso de Estado Mayor y asciende al primero de
estos, conocido vulgarmente como jefe. El celeste, al contario que
los rojos, carece de entorchados y lleva siempre los flecos del mismo
color que el tejido, que es también de seda, y la cabeza del borlón
dorada. El violeta, y menos común, es el distintivo que se le concedía
al militar cuando había colaborado en la campaña participativa de la
Guerra Civil, razón por la cual lleva un pasador dorado de metal con
las fechas 1936-1939. En este caso tampoco llevan nudos y tanto el
tejido de seda como los flecos y la cabeza son del mismo color.
Para que la donación del fajín militar a una imagen obtenga el
mayor honor, debe entregarse en el mismo acto la máxima distinción
concedida al general en cuestión, si éste no se encuentra en activo.
En caso contrario, se entregaría una copia del citado galardón. Así lo
posee la imagen de María Santísima de la Esperanza Macarena ya
que, además del fajín del general Gonzalo Queipo de Llano, ostenta la
cruz laureada de San Fernando, máxima distinción del ejército español
concedida por méritos de guerra, que suele lucir en la moña de la
citada prenda. La mencionada condecoración fue donada a la Virgen
por la familia del general, una vez fallecido, tras haberla lucido la
Virgen de la Salud de San Gonzalo el Lunes Santo de 1965 por haber
sido hermano mayor honorario de dicha hermandad desde un año
después de su fundación.
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